El otro día me hice con este libro de la línea ICONS de TASCHEN. La verdad es que soy más que reacio a utilizar el Flash en diseños web más que para cosas puntuales. La experiencia como usuario y como desarrollador me han llevado a esa conclusión.
El libro, en general, está bien. No es un libro de lectura, es un libro visual con el que deleitarse observando los diseños de una selección de webs hechas con Flash. Hasta aquí, cualquiera podría pensar "Qué tontería... pues abres el Google y te pones a mirar". La palabra clave es selección. Y es que estos proyectos no solo se muestran, sino que también tienen un pequeño comentario. Cierto es, que de una o dos líneas. Pero ese comentario sobre alguna funcionalidad o detalle suele ser bastante enriquecedor: cómo se modifican los contenidos, qué aspecto pesó más a la hora de desarrollarla, qué sección se destaca especialmente. Cierto es, también, que es mejor ir a la web (si es que existe todavía... sight) y revisarla en base a esos comentarios para obtener mejores resultados.
Lo mejor del libro, los dos casos de estudio que hay al principio del libro (¡¡lástima que sólo sean dos!!). De ellos he extraido ideas interesantes. Lo peor... pues el texto de introducción, que me puso de mala leche. ¿Porqué? Por lo de siempre. Flores y más flores al Flash, no podría ser de otra manera siendo el libro de lo que es. Y algunos aspectos me resultaron pedantes y demagógicos. Por ejemplo, cuando comenta que la usabilidad de un sitio se debe medir en base al tipo de usuarios a los que está enfocada. Y es verdad, pero la mayor parte de los sitios están enfocados a cuanto más público mejor.
El caso es que el sr. que escribe la introducción hace un comentario criticando a aquellos que piensan que si su madre no es capaz de utilizar un sitio web, es que no tiene la suficiente usabilidad. Con este comentario ya no estoy de acuerdo. Me parece que la madre de cualquiera es tan buena para probar la usabilidad de un sitio web como cualquier otra persona, siempre que la madre sepa lo que es un ordenador e Internet...
Cuando para afianzar su comentario dice que a ver si poniendo a la susodicha madre a los mandos de un Ferrari con cambio manual a ver cuantas veces se le cala y justificar así que no podemos decir que la pobre mujer no sabe conducir... demagogia.
Sigo pensando que por muy profesional que sea el público objetivo, no debemos desviarnos demasiado del principio KISS (Keep It Simple, Stupid). Y mi experiencia en el diseño de interfaces me lo ha demostrado. Para aclarar esto: el porcentaje de estudiantes de ingeniería superior de telecomunicaciones que no entiende una interfaz web que ha sido hecha para ser más simple que el mecanismo de un botijo, si bien no es elevado, es suficiente como para que los encargados de resolver las dudas no se olviden de que ahí fuera hay un mundo de gente que simplemente ve pero no mira.
La visión elitista de que sólo una mente especialmente creativa es capaz de entender un producto, me pone malo. Y eso si nos olvidamos de la accesibilidad, que por mucha mente creativa que tengamos si no tenemos el plug-in de Flash instalado con su versión correspondiente o superior...
Estoy de acuerdo con el sr. al que entrevistan en el caso 2:
...es imprescindible que los usuarios entiendan como está estructurado un sitio web y como funciona...
...no estoy de acuerdo con que el diseño de interfaces se haya detenido en algún momento a finales del milenio pasado, ni con que Jackob Nielsen sea el Moisés cibernético que escribió sus leyes definitivas...
En general, un producto interesante. Ya me haré con el tomo 2... :D